Valquirias en la Calima ©2022 Tomás Osorio del Río
Doce caras estampadas contra el as… aplastadas por la máquina, exiliadas de sus sesos, expulsadas del crepúsculo especula… que tras las trágicas láminas de a…
¿Por qué sulfura en estas hojas se… ¿Por qué dormitan estas ramas ante… ¿Por qué permanece esta madera? Quiere morir la primavera Tras apaciguar el sol sus llamas e…
¡Alerta! De entre los hombres ha… que reniega de su especie; aquel que al ser humano no desprec… pero en sus rasgos difiere. Ha renegado de esta subespecie
Extraño el sueño de su mirada cau… inclemente, acusada, disruptiva, y tiéntame el verso, para que yo l… Amor aprisióname en tu juego onírico;
Si te escribo es por inercia, por su ausencia, por aquella impotencia propia de la existencia de una conciencia
Hoy te he vuelto a ver tras tres o… hoy tras tres intentos tuve suerte… hoy te tuve, a ti, que vagas tras las urbes. Al cielo imploro ser fuerte
Fría y rosa la gula infante, y sabrosa, en la savia rebosante de su fresa lujuriosa. Ese pie de fresa esconde
La sonrisa de olivares, vil traviesa de penurias acecha tras sus zarzales en ahogares de lujuria, ¡Ingrata sea su sierpe, Dña. Oliv…
Se me ha antojado el panecillo, se me antoja... ese churrusquillo, de toma, pan y moja. Se me ha antojado
De papeles, la montaña que te ahorca en su sendero, todo aquel es testimonio si lo entierra su heredero. ¿Quién, tras ellos, escribe
En las llanuras del toral, tras la posada, se avista un columpio en una terraza, donde los niños juegan
Es el agua ese mal tan necesario que agasaja a los infantes y los calma con su ahogar. Así se siente un niño
La senda manchada en refriegas denota escasez en la sed que de sangre empaña sus guerras. La guerra aclamada en hiatus se nutre en su pena,
Es para mí complicado dedicarte esta poesía: arte mayor la que exclamas, arte menor la mía. En danzas suena la música efímera
Del anciano ciprés vuela el pato empujado por la brisa. Pasa mal rato, tiene prisa,