(Gustavo Adolfo Bécquer)
(1965)
#EscritoresEspañoles #Generación27 Retratos con nombre
Mañana vieja. Filosofía. Nueva mirada hacia el cielo viejo. Con mi mano los hilos recogidos a un punto nuevo,
La severidad del mundo, estameña, el traje de la mujer amada, el camino de las hormigas por un c… no impiden esa tos en el polvo bes… mientras bajo las nubes bogan aves…
¿Qué linfa esbelta, de los altos h… hija y sepulcro, sobre el haz sile… rompe sus fríos, vierte su corrien… luces llevando, derramando cielos? ¿Qué agua orquestas bajo los manso…
Pájaro como luna, luna colgada o bella, tan baja como un corazón contraído… suspendida sin hilo de una lágrima… Esa tristeza contagiosa
Así besándote despacio ahogo un pá… ciego olvido sin dientes que no me… casi humo en silencio que pronto e… cuando tú como lago quieto tendida… Así besándote tu humedad no es pen…
¿Qué firme arquitectura se levanta del paisaje, si urgente de belleza… ordenada, y penetra en la certeza del aire, sin furor y la suplanta? Las líneas graves van. Mas de su…
¡Cuántas veces sabiendo que eras tú, yo caía en tu misma sonrisa, mar abierta, mar plana, estival, pez, sacando
Vasos o besos, luces o escaleras, todo sin música asciende cautament… a esa región serena donde aprisa se retiran los bordes de la carne. Un carroussel de topes, un límite…
El mar castiga el clamor de las bo… que pasan sin miedo de pisar a los… a aquellos que besándose sobre la… toman formas de conchas de dos en… El mar bate sólo como un espejo,
La cobra toda ojos, bulto echado la tarde (baja, nube)… bulto entre hojas secas, rodeada de corazones de súbito par… Relojes como pulsos
Se ha de ver en tus manos el vient… anclado en tus dedos, alzarse y prenderte. De llama en tu pelo —crepúsculo—,
Eres hermosa como la piedra, oh difunta; Oh viva, oh viva, eres dichosa com… Esta orquesta que agita mis cuidados como una negligencia,
El mar, la tierra, el cielo, el fu… el mundo permanente en que vivimos… los astros remotísimos que casi no… que casi a veces son una mano que… Esa llegada de la luz que descansa…
He aquí que por fin llega al verbo… tristísimo minuto, lento rodar del día miserable, diminuto captor de lo que nunca pu… Un día como alguno
Dime pronto el secreto de tu exist… quiero saber por qué la piedra no… ni el corazón un árbol delicado, ni por qué esa niña que muere entr… no se va hacia la mar como todos l…