Sale loco de contento con su cargamento para la ciudad, sí, para la ciudad. Lleva, en su pensamiento

En tu cuerpo a flor de fuego tiene… un temblor de primaveras palomitai un volcan corre tu venas Y mi sangre como grasa tiene palom… en tu cuerpo quiero hundirme palom…

Cuchillo ‘e palo, platillo y loza. ollita de barro, sí le he comprado a mi cocinera.

Ya se inició la toma, compañero calla la boca, cuidado con los pacos, que pueden dejar la escoba. Sujeta bien al chiquillo,

Herminda de la Victoria murió sin haber luchado derecho se fue a la gloria con el pecho atravesado. Las balas de los mandados

Estaba la beata un día enferma del mar de amor el que tenía la culpa, era el fraile confesor. Chiribiribiribiri,

Ingrata goza tu gusto déjame a mi padecer. Que una sola vida tengo y por ti la he de perder. Ay mi palomita

Caminando, caminando voy buscando libertad, ojalá encuentre camino para seguir caminando. Es difícil encontrar

Esta el conejí comiendo lechú come que que te co mientras miras tú. (mientras miras tú)

Cuando el sol se inclinaba, lo encontré, en un rancho sombrío, de Lonquén, en un rancho de pobres,

Yo no canto por cantar ni por tener buena voz, canto porque la guitarra tiene sentido y razón. Tiene corazón de tierra

Siete rejas, siete llaves, siete ríos, siete mares. Siete son los que te llevan, siete son los que te traen, siete son mis siete mares.

Yo no quiero la Patria dividida ni por siete cuchillos desangrada, quiero la luz de Chile enarbolada sobre la nueva casa construída. Yo no quiero la Patria dividida

Qué sabes de cordillera, Si tú naciste tan lejos Hay que conocer la piedra Que corona al ventisquero; Hay que recorrer callando

Que vivan los días libres, viva el San Lunes, viva el San Guish, viva la Semana Santa, viva el Dieciocho y el chacolí.