¿Cuántas veces nos tenemos que hacer esto?
¿Cuántas veces son las suficientes para entender que ya no queda rastro de mi dignidad?
¿Cuántas horas tengo que llorar para lograr por fin sacarte de mi sistema?
¿Cómo es que sigo de necia, testaruda, absurdamente idiota insistente con algo que me grita una y otra vez a la cara QUE NO?
¿Qué diablos me hiciste? ¿Porqué no logro soltarte? ¿Porqué cada despedida duele más en vez de ir siendo más fácil?
No entiendo, en serio que no.
Daría lo que fuera, en serio, lo que fuera, por ser yo con decidas construir un 'algo’ juntos, porque las relaciones no solo se dan como por arte de magia, SE CONSTRUYEN y entre tú y yo (aparentemente) solo hemos creado casos, dolor, lágrimas, odio (jamás te he odiado) y algún que otro momento feliz, que era de lo que me seguía sosteniendo para seguir con la idea de un “Nosotros” a futuro...
Pero ya no puedo, debo ni quiero seguir tapando el sol con un dedo ¿sabes?
No puedo (ni quiero) seguir siendo tu segunda opción, merezco más que un par de horas al día algunos días a la semana, merezco TODO porque lo SOY y por más que me duela el pecho decirlo y aceptarlo, esta vez es así, o es todo o es nada...