Para mí, “el paraíso” puede ser, simplemente, apoyar la cabeza

Habla el silencio; tala mi soledad, y... siento frío!

Corro sin cesar y el rugir del viento me golpea. Los sauces implacables y desafiantes,

Desde mi ventana todo parece igual, los árboles o aquella pared que una vez estuvo llena de musgo dando un verdor húmedo a mi jardín, pero no es cierto... Había un árbol grande que ya n...

Eras tres años menor, con tu risa reluciente, siempre estarás en mi mente, ¡te recuerdo con amor! Aunque todos te adoraran,

En soledad el eco del silencio anida en mí.

Ese sonido de las pisadas sobre las hojas secas. Esconde una sensible melodía que encanta.

Amanecer en un día nublado; nos hace verlo, como el sutil frescor que nos regala el cielo.

¡Brotes de amor! en esa rosa blanca, sobre mi pecho.

Cae la gota sin saber su final. Turbio destino.

Mi querida maestra: Eras una y única nuestra, latía en nuestro corazón, la fe de volverte a ver, sin nosotras poder saber,

Me siento pegada a esta tierra est… que ya no da sus frutos y mucho menos el perdón. Para mí, el hoy es incierto y el mañana

¿Noche de estrellas, luciérnagas y luna? ¡Todas me alumbran!

La mentira y la verdad, suelen ser o no creíbles. Todo depende del momento en que se digan.

La carne muere, envejece y nos duele como los años. El alma, siempre viva, nos impide morir.