Haiku 47
11/10/2018
#Haiku
Abren sus pétalos. esas flores tan tristes, "Si llora el cielo"
Hoy he caminado descalza sobre la hierba húmeda. Lo hice, cerrando los ojos,
Sus risas, llantos y carantoñas son inagotables. La dicha de tenerlas enriquecen mi vida.
Amanecer de un domingo gris, lleno ¡de abrazos! ¡de despedidas!
¡Brotes de amor! en esa rosa blanca, sobre mi pecho.
No soy perfecta, la perfección no es vida. Es obsesión, y eso, ya es un defecto. ¡Errar para vivir!
¡Dios! me arrepiento, a ellos pido perdón, Tú, ¿me ayudaste? Fui tan frágil, tan débil sobre todo, tan sola.
Lástima siento, bella flor de un d… que irradias tanto encanto y lozan… naces hoy, pronto te verás marchit… vertiendo esa fragancia de Afrodit… Tan suave, bella y dulce como miel…
Y esa hoja verde, solitaria y endeble, vaga en el agua.
Mi querida maestra: Eras una y única nuestra, latía en nuestro corazón, la fe de volverte a ver, sin nosotras poder saber,
¿El primer beso? fue el bello despertar de la inocencia .
Si los sueños se pudiesen escoger y la vida fuese la manifestación de ellos, no habría por qué sufrir;
Miro al espejo más, no me reconozco y sonreí. No era yo, es una imagen que sólo me contempla.
¡Qué solitarias emergen las espigas de entre las ramas! Entre nubes, sus largos tallos al sol invocan.
Cae la tarde y me sorprendo contemplando el ocaso del día, cuando una brisa fría y húmeda me estremece.