Ya estaban lejos los bronces malditos. Sobre los muertos, ya no volaban los ángeles. Solo volaban los cuervos sobre los muertos malditos.

Mientras lentamente los bueyes cam… las viejas carretas rechinan… rech… Lentas van formando largas teorías por las guardarrayas y las servent… Vadean arroyos, cruzan las montaña…

Tengo el decir enfermo de una nieb… oh Dios, y se me torna de humo la… Yo la deseo límpida… Yo la ambici… El valle tiene nieblas y lo veo a… Sol, oh sol, oh sol mío! Necesito…

Ciñe orgullosa de Minerva el casc… El ideal que en su leyenda flota traduce un aislamiento de gaviota desmayada en un sórdido peñasco. Decir su nombre es como abrir el f…

Cada vez que hago bien, oh corazón… una dulzura fresca, cuya virtud co… veo dulces sonrisas en bocas que n… y manos invisibles que me están ap… Oh gozo, oh incomparable fruición,…

Musa patria: pon a tono con la autóctona belleza la anacrónica realeza de tu manto y de tu trono. No es el perpetuo abandono

Vine a decirte adiós, piedra desnu… Te quedas sola en medio de la noch… Muchas veces en ti recliné mi cabe… y tuve el sueño de Jacob. Ahora, al continuar el viaje, no me llevo

Tengo llena de verde la pupila: verde de campo, de tus ojos, verde de mar y de esperanza, en el que p… rosas de amor tu hermana Primavera… ¿Será mi corazón una esmeralda

El hombre duerme sobre el banco... El hombre gris, el hombre negro, e… La luna poetiza la figura dormida y alarga la esquelética geometría… que apresa el sueño del hombre en…

Somos retardatarios, corazón, no l… La civilización nos ha roto el pai… Yo, francamente, adoro la secular… si quieres, corazón, un poco miser… de la carreta vieja que salta en l…

Esta camisa blanca que mi madre ha… tan llena del aroma íntimo de mi c… tiene una santidad cuyo oculto sen… ni envejece ni pasa…! Yo podré ser mañana un hombre pote…

Cuando ya yo no exista, y tu cabez… ostente la belleza de la azucena e… a quien quiera escucharte, si no l… yo fui su amor Repítelo sin tregua, muétrales est…

Era una cleptómana de bellas frusl… robaba por un goce de estética emo… Linda facinerosa de cuyas fechoría… jamás supo el severo juzgado de in… La sorprendí una tarde, en un come…

Abandonada a su dolor, un día en que la sombra la envolvió en su… me dijo el corazón que ella vendrí… en el milagro espiritual de un vue… Abrí los pabellones solitarios;

Está encantada y encantada queda en el recuerdo que a su luz se iri… Nadie espere que hipócrita o sumis… a cortejar el deshonor acceda. En carrera ideal su fama rueda;