Durante muchos siglos la costumbre fue ésta: aleccionar al hombre con historias a cargo de animales de voz docta, de solemne ademán o astutas tretas…

Ayer fue miércoles toda la mañana. Por la tarde cambió: se puso casi lunes, la tristeza invadió los corazones y hubo un claro

El otoño se acerca con muy poco ru… apagadas cigarras, unos grillos ap… defienden el reducto de un verano obstinado en perpetua… cuya suntuosa cola aún brilla haci…

Cuando estoy en Madrid, las cucarachas de mi casa protesta… La luz no las anima a salir de sus… y pierden de ese modo la oportunid… mi dormitorio,

Aquí paz, y después gloria. Aquí, a orillas de Francia, en donde Cataluña no muere todavía

Entonces, en los atardeceres de verano, el viento traía desde el campo hasta mi call… un inestable olor a establo

Otro tiempo vendrá distinto a éste… Y alguien dirá: «Hablaste mal. Debiste haber cont… otras historias: violines estirándose indolentes

Si tuviésemos la fuerza suficiente para apretar como es debido un tro… sólo nos quedaría entre las manos un poco de tierra. Y si tuviésemos más fuerza todavía

La lágrima fue dicha. Olvidemos el llanto y empecemos de nuevo, con paciencia,

Noche estrellada en aceptable uso, con pálidos reflejos y opacidad lu… vieja chistera inútil en los tiemp… como escuálidos galgos sobre el mu… definitivamente eres un lujo

Ninguna era tan bella como tú durante aquel fugaz momento en que… mi vida entera.

Milagro de la luz: la sombra nace, choca en silencio contra las monta… se desploma sin peso sobre el suel… desevelando a las hierbas delicada… Los eucaliptos dejan en la tierra

Mientras tú existas, mientras mi mirada te busque más allá de las colinas, mientras nada me llene el corazón,

Vosotras, piedras violentamente deformadas, rotas por el golpe preciso del cincel, exhibiréis aún durante siglos

Te llaman porvenir porque no vienes nunca. Te llaman: porvenir, y esperan que tú llegues como un animal manso