(A María Kodama)
#1976 #EscritoresArgentinos #LaMonedaDeHierro
Entra la luz y asciendo torpemente de los sueños al sueño compartido y las cosas recobran su debido y esperado lugar y en el presente converge abrumador y vasto el vago
Un hombre encarcelado y hechizado, un hombre condenado a ser la serpi… que guarda un oro infame, un hombre condenado a ser Shylock un hombre que se inclina sobre la…
Aquí otra vez, los labios memorabl… He persistido en la aproximación d… He atravesado el mar. He conocido… He querido a una niña altiva y bla… He visto un arrabal infinito donde…
A mí, tan luego, hablarme del finado Francisco Real. Yo lo conocí, y eso que éstos no eran sus barrios porque él sabía tallar más bien por el Norte, por esos laos de la laguna de Guadal...
Alta en el alba se alza la severa faz de metal y melancolía. Un perro se desliza por la acera. Ya no es de noche y no es aún de d… Suárez mira su pueblo y la llanura
Por el deceso de alguien —misterio cuyo vacante nombre pose… hay hasta el alba una casa abierta… una ignorada casa que no estoy des… pero que me espera esta noche
Porque la entraña del cementerio d… fue saciada por la fiebre amarilla… porque los conventillos hondos del… mandaron muerte sobre la cara de B… y porque Buenos Aires no pudo mir…
De los muchos problemas que ejercitaron la temeraria perspicacia de Lönnrot, ninguno tan extraño—tan rigurosamente extraño, diremos—como la periódica serie de hechos de sangre que culmi...
No salió de una madre ni supo de m… Idéntico es el caso de Adán y de… Está hecho de azar. Inmediato o c… lo rigen los vaivenes de variables… No es un error pensar que nace en…
Grata la voz del agua a quien abrumaron negras arenas, grato a la mano cóncava el mármol circular de la columna, gratos los finos laberintos del ag…
Han cambiado las formas de mi sueñ… ahora son laterales casas rojas y el delicado bronce de las hojas y el casto invierno y el piadoso l… Como en el día séptimo, la tierra
Los días y las noches están entretejidos (interwoven) de… de miedo, que es un modo de la esp… de memoria, nombre que damos a las… Mi tiempo ha sido siempre un Jano…
El poniente de pie como un Arcáng… tiranizó el camino. La soledad poblada como un sueño se ha remansado alrededor del pueb… Los cencerros recogen la tristeza
Durante siglos la infinita arena de los muchos desiertos ha sufrido tus pasos numerosos y tu aullido de gris chacal o de insaciada hien… ¿Durante siglos? Miento. Esa furt…
Imposible negar la novedad (tipográfica) de esta novela. Sepa el asombrado lector que no se trata de un libro, sino de un expediente que incluye un telegrama facsimilar de la Western Un...