Has entrado al otoño me dijiste y me sentí temblar hoja encendida que se aferra a su tallo

Digo amor y lacera mi cuerpo el desamparo.

Hola dije mirando tu retrato y se pasmó el saludo entre mis labios. Otra vez la punzada,

Quiero entrar a la muerte con los ojos abiertos abiertos los oídos sin máscaras sin miedo

Sobrevivo. Alegrovosamente so bre vi

No te pierdas, Teseo vuelve a mí. La playa está desierta tengo los pies sangrientos de correr en tu busca

Malogrados los ojos Oblicua la niña temerosa, deshechos los bucles. Los dientes, trizados. Cuerdas tensas subiéndome del cuel…

Sólo éste ahora es mío este momento el pasado escapó y no vislumbro el rostro del futuro.

Tu muerte te congela estás inmóvil mi vida en cambio fluye y me acerca veloz

En este aposento que soy yo mi realidad (la cotidiana ... realidad)

También me gusta el amor al que le cierran la puerta el que entra por la ventana volando sobre una cuerda.

Dicen que la muerte es solitaria que nos morimos solos aunque estemos rodeados de aquello… pero tú me llamaste y yo no estuve:

Estimado señor: Esta carta la escribo en mi cumple… Recibí su regalo. No me gusta. Siempre y siempre lo mismo. Cuando niña, impaciente lo esperab…

Yo, poeta de oficio, condenada tantas veces a ser cuervo jamás me cambiaría

Todos lo que amo están en ti y tú en todo lo que amo.