En la cima de una montaña
se encontraba un gran santuario,
pastizales de piedra y lana,
adornaban todo el collado.
Santuario es donde se adora
a los dioses sin agravio
Yo no veía cerca la hora
de llegar hasta tus labios
Pendiente ardua e inclinada
Era el gran reto para mí
Mas por ti era capaz de subir
Con cansancio y aún sin nada
Por entrar a aquel recinto
De tu boca en primavera
Podía caminar extinto
De un mal ánimo cualquiera
Pero el cerro se derrumbó
Andando a trote de caballo
aunque mi andar desquebrajó
Mi esperanza no vino abajo
Tuve que conformarme
Para tu boca poseer
En un sueño poder besarte
Ni los ángeles me creen
Segundos de placer constante
Tú me hiciste merecer
Mayor anhelo que poder repetir
Aquel dulce ósculo de tremendo amor
Mas el sueño no puedo dirigir
Me queda sólo de tus labios el sabor.