#Cubanos #Matanceros #Mujeres #ParaNiños #SigloXX
¡Limón, limón! Limón agrio, limón criollo, limón dulce, limón chino,
EL día, una rosa blanca. La noche, un caballo negro. (La tarde, una mariposa que ha detenido su vuelo.)
Miniatura marinera, filigrana de madera, ámbar, jade verdemar. Caballito de sal fina, bailarín, aguamarina,
¡Tilín! ¡Tilán! Campana de oro de la mañana. ¡Tilín!
En Playa Larga, el uvero, como homenaje al valor de los niños artilleros, ya no florece en febrero: en abril abre la flor.
Cua cua, cantaba la rana, cua cua, debajo del agua. Pasó una paloma:
Moterita de madera llena de polvos de arroz, con tapa de cristal fino y la mota de plumón. ¿De quién será la motera
Siete relojes, siete semillas, siete pelotas y una sombrilla. Siete burbujas,
Entre las lomas el día nace. Límpidas gotas la noche esparce sobre la hierba
De la lunita nueva vuela una garza; tiene el cuello nevado, de azul las alas. Volando viene
Caperucita Roja, juega conmigo: yo seré un día lunes y tú domingo. Juega conmigo:
¿Has visto a la mariposa danzando sobre el rosal para saludar la rosa...? ¿O los vuelos del zunzún alrededor de las flores
Subes a la portada, ¡quiquiriquí! entusiasmado cantas, ¡cucurucú! Veo tu pico amarillo,
La Sierra Maestra ¡tan alta, tan grande! ¡tan brava, tan bella! De roca para el tirano; para el patriota, de miel.
El oro de la tarde tiñe la copa de una vieja yagruma quieta y sedosa. Duerme cansado el viento