POESÍA JAPONESA
Muerte roja encaje de existencia, hacedora del ser. Ella hiló mi alma con bordados de vida
Pasar la noche bebiendo de tu boca sorber tu vida en este ocaso ardiente. Detengo el tiempo,
Me siento bien así rompo un par de corazones cada día por el que me rompieron a mí. Voy paseando por medio de Graná tarareando una canción
El colibrí liba muy dulcemente MI roja boca. Como si fuera fuente de licor dulce.
Hay pecados que son una delicia tan exquisita que no hay confesiones ni sacerdotes que puedan perdonar. Una vela roja recorre mi pecho
Somos los puentes de luz que unen la tierra belleza viva con el fulgor del cielo iluminando vidas
Mis muslos se estremecen, notan tu ausencia los entrecruzo, intento engañarlos con el roce de mi propia piel.
Veo MI reflejo en su iris el amor sale de mis ojos y se mete en los suyos su boca se acerca a la mía besos fundidos
Abrázame fuerte desde lejos, no dejes que la distancia apague en ti mí existencia. Bésame en la noche hazme el amor
Diosa Selene iluminas la noche lucero añil bellos astros nocturnos encendiendo las sombras.
En aquel prado la mariposa vuela libando versos. Bajo la lluvia el sol muere en la tarde,
El jardín níveo pétalos de jazmín blanquean su pelo trenzas de flores albas ciñen su bella cara.
Dicen del Müki que es un Haiku expulsando la rigidez de 17 sílabas e inició “la forma libre Haiku”. (Rechazando el uso de los kigos, aunque puede tener kireji en el tercer verso como el...
Invierno helado primavera en el frío las flores brotan Lluvia de otoño cristales empañados
Confieso mi deseo; cargado de tensión subiendo a la superficie entintand… las palabras. Existe en mis entrañas,