De frente a frente
Parte de la obra "MAOA-L, Poesía de los desafines de un corazón criminal"
He estado pensando en el pasado que ni siquiera es mío.
En tus anhelos. En tus metas. En tu historia. En tu cara.
En tus movimientos.
Tintineo los dedos sobre la mesa, generando un ritmo que vaya
de acuerdo con la poca lógica que en ti encuentro.
Me traes demente. Te busco perdido en las miles de caras,
no eres nadie, no te encuentro fácil.
Hago suposiciones de cuando al fin te encuentre; cómo
veré tu rostro, para no olvidarlo; cómo tomaré tus manos,
cómo te forzaré, cómo me dará orgullo estar a tu lado,
ser la envidia prominente, cómo me causará ternura tu
confusión. Pero por ahora, me conformo con soñarte, prepararme.
¿Cómo me acercaré a ti, sin parecer peligroso? ¿Cómo voy a
arriesgar a mi familia por una simple obsesión?
¿Cómo saldré de mi vida, con la única razón de verte?
¿Cómo me convierto en ti? ¿Cómo me anticipo a tu mente?
Empezar fue fácil, pero terminar es lo que me da pavor.
Veo el viento y no me responde a tu nombre.
No salgas, te necesito aquí, no tengas ahora miedo, estás
a punto de lograr tu mejor paso. Tu mente es tan increíble como
tus actos. Y tú, tan egoísta con tu arte, solo me
dejaste una mancha, carne fría y un recado.
Me pregunto si me vez. Me pregunto si te has dado
cuenta de cuándo y cuándo te sigo. De lo que de ti sé.
Sobrepasas mi temperamento, he de confesar, y pese a ello
sigo rebuscando algo entre todo lo que me hace de ti sospechar.
Eres mi trabajo. Quise ser tu responsabilidad, quería espiarte
incluso, quise verte tras vidrio, madera y metal.
Me sé tu perfil de memoria, podría bosquejarte en la
servilleta del café, pero eso sólo podría acerté huir.
Hueles bien. Estás a un lado y el sudor no refleja
al cien tu cansancio.
Atraviesas los vasos con un vistazo, ordenas algo sin licor,
sin apresuro y sin rastro. Un “hola” jamás me costó tanto.
Dejo el ritmo en silencio, me giro de nuevo pasando
del suelo a tu cuello y cuando se encuentran nuestros
nítidos ojos, me paro en seco y entiendo a qué
tengo en frente, a qué me enfrento; eres más de lo que dice mi gente.
Tu reloj se balancea, al igual que mi imaginación.
Se retrasa el refuerzo, conservo la tensión.
Me apuntas con el cañón.
Indigente inteligente, asesino con cautela, por fin,
después de tanto, de frente a frente.
Piaciuto o affrontato da...
