Perdón por usar esto como cartel de protesta o la mal llamada rebeldía
La vacuidad de todos los caminos pasa desapercibida por las horas de quienes no tienen tiempo para amar, para amar otra cosa que no sea el trabajo, el carro, la casa, el viaje, el dinero y la pareja; se pasean por su casa sin amar sus corrientes de aire y el calor de la estufa, se rodean de personas sin conquistar sus almas, se piensan la vida sin siquiera querer vivirla, miran sin contemplar las miradas y caminan solo con mover los pies y nunca para encontrar otros; sus insulsas palabras no completan una oración que se pueda leer, la bagatela de sus ropas caras no los cubre y la insipidez de la comida cara de restaurante nunca logra alimentarlos. Su vida tonta y ligera esta siempre llena de trabajo porque la falta de amor les hizo temer a la escasez sin tener en cuenta la inocuidad del dinero, allá están aquellos caminantes errantes, jinetes motorizados tomando la avenida de la vida a toda marcha sin detenerse a recorrerla bajo la luna llena, con el frio de los días y el ardor del amor...