#Colombianos #Mujeres #SigloXX (1995) Laúd memorioso
En las manos del alba vi la rosa. Huía de sí misma perseguida por su propia hermosura repetida en pétalos y en rosa jubilosa. Con un alto vaivén de mariposa
De aquel amor que nunca fuera mío y sin embargo se tomó mi vida, me queda esta nostalgia repetida sin fin, cuando sollozo y cuando r… A veces, desde el fondo del estío,
Undívago país, ancha y dorada frente en vivo ejercicio de poesía… comarca donde piensa luz el día y la noche sirenas olvidadas. Sabe a sal la blancura derramada
No sé nada de ti. De mí no sabes nada. Sólo que al encontrarse nuestros ojos un día,
Mis ojos niños vieron —ha mucho tiempo—alzarse hasta la nube un vuelo de sucesivos verdes que el aire en torno
Cuando presiente el corazón la glo… de ser libre por gracia del olvido… me llega entre la noche, como el r… del mar en la distancia, tu memori… Con ella viene la tenaz historia
Alguien pasa y pregunta por los jazmines, madre. Y yo guardo silencio. Las palabras no acuden en mi ayuda, se esconden
Te contaré la tarde, amigo mío. La tarde de campanas y violetas que suben lentamente a su pequeño firmamento de aroma. La tarde en que no estás.
Amor de amor aquel que nos uniera una vez en el tiempo ya distante. Amor en que tú fuiste amado, amant… y yo amante y amada también fuera. Otro amor sin igual no conociera
El mar danzaba entre las islas desnudo y joven como un dios. Sobre su piel resplandecía el agua azul, llena de sol. El viento alegre del verano
Detenida en el río translúcido del viento, por otro nombre, amor, la llamaría
Nada igual a esta dicha de sentirme tan sola en mitad de la tarde y en mitad del trigal; bajo el cielo de estío
Como ir casi juntos pero no juntos, como caminar paso a paso y entre los dos un muro
Se me murió el olvido de repente. Inesperada— mente, se le borraron las palabras
Te rompieron la infancia, Leyla K… Lo mismo que una espiga o el tallo de una flor, te rompieron los años del asombro y la ternura,