Podría embriagarme sólo con tus besos, tatuarme en la piel tus cualidades, robarme sutilmente
De tanto visitar lugares abandonad… caí un día por accidente en tu abandonada vida llena de tonos grises, de grietas y telarañas,
Hace dos años un catorce de agosto se detuvo el tiempo en una estación. Por un accidente
Conectaron sus universos sin decirse nada porque no era necesario, porque no eran capaces de hacerlo. Conversaron sin hablar,
Mirarte a los ojos, reflejarme en ellos, parpadear de pronto y ver que no estás sino solo yo
No me gustaría dedicarte poemas, ni siquiera unas pocas líneas, ni canciones o dibujos, ni frases de amor ni de odio. Es más, ni siquiera quiero
Durante un año fuiste mío pero por siempre seré tuya, ahora mi corazón está frío pues tu ausencia cavó mi tumba.
A ti se te hizo difícil amar, a mí me costó olvidar, pero al final tu muerte es cuestión de esperar.
Me paseo entre cuatro paredes, pateando recuerdos, corriendo papeles, nadando en mis miedos. No te perdí,
Son tus ojos Negros como la noche Y preciosos como la luna Los que deberían ser míos, Y no de ella.
Volver a sentir vida después de mucho tiempo, escuchar vinilos, dormir de a ratos, cocinar al natural,
Llueve a cántaros pero no puedo escampar ni usar un paraguas para el aguacero de mi corazón.
Yo entiendo bien que quisieras estar conmigo (porque quién no), pero sé muy bien quien jamás estará contigo
A veces, en las noches, tengo sed, como muchos de los mortales. A veces, en la madrugada, tengo frío, como miles
Cuando me di cuenta era tarde: me había enamorado de un idiota que al final optó por abandonarme.