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Carta y redención

(30 02 26) Carta
el porqué para decirte: Lirio mujer, espíritu de luz
Dante abajo cruzó, yo cruzo allí por tí
y si cantando voy, canto para tí...

Y juro que verte felíz y bien, mi alma quiere,
que salga tu mirar a sonreír y así el sol resplandece.
Que dejaras el ayer ya sin mí caminado
porque me quedé a luchar con lo que te hiere,
para que esa sonrisa de loca gatita en tí aflore.
 
He andado en la tierra por donde Dios me ha dicho,
y no me arrepiento pues así llegué a estar contigo.
El sol que todo ilumina eres tú, el color, lo dulce,
tambien lo gracioso que río por ser a veces tan torpe
y fábulas que llegan de la luna cantando en la noche.
 
Me tienes guardadas mis más de mil curiosidades,
también el calor que de ese fuerte abrazo me sacaste.
Ahora que he regresado de estar abajo con Dante
y como él, también crucé la oscuridad para liberarte,
es que aveces cuesta y demora tanto sanar y regresar
pero te envié hasta mi ángel para que te guarde,
espero no me odies, pero no quedó otra manera...
 
Mi dama de luz, mi valiente fada, mi dilecta,
me parte el alma cuando la voz se te llena
de ahogadas palabras bañadas en pena
 
Ay mi titiritera de labios perfectos y poesías,
tus lágrimas se fundían ya frías con las mías,
mejor es tu sonrisa que de amor me mordía
 
ay mi angemelita de luz...
 
Ya no quiero recordar ni que recuerdes lo malo que fué,
hoy siento que tanta batalla nos hizo más fuertes.
“-Horrible guerra vá a empezar, la oscuridad he de enfrentar,
Ser separado de la gran dama de mi alma...,
es horrible tan lejos estar, la oscuridad me vá a matar,
lo hago por la vida de la gran princesa de mi alma-”
estos meses pensé...
 
y sentí muchas veces a las lágrimas a lo hondo caer
pero ninguna nubló mi decisión de lo oscuro quitarte,
en eso consiste la libertad, de no renunciar y todo dar,
tú a mí me quitaste las cadenas por ser tal como eres,
y no hablo de lo sobrehumano, sino de como sientes
para mí es adelante y ya nada me interesa que no sea natural,
no, ya no quiero nada más de lo que sea humanidad.
 
Mi alma gemela, Latika, mi nube azul bailarina
tus piecitos de princesa besé con una lágrima
tan pura y pequeña que no te diste cuenta
 
Ay mi sabia, mi lirio mujer, mi púrpura de luz
te busqúe tanto para decirte que no temas,
si a casa no fuí, fué por no manchar tu puerta,
tu sabes que aveces demora y cuesta tanto sanar y regresar,
y mas cuando te enfrentas solo a la propia oscuridad...

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