Hundo la cuchara en la blanda firmeza del yogur y me lo como, lentamente, de pie,… de la nevera abierta. Paladeo su frescor gratificante,
Otra maldita tarde de domingo, una de esas tardes que algún día escogeré para colgarme del último clavo ardiendo
No puedo leer un solo libro. Una sola página. Un solo párrafo. Ni una línea. No puedo escribir,
Es tarde ya en la noche y la playa está desierta. Rompe el mar sobre las rocas. Un aire cálido,
Y ahora que estás en España que como ya sabrás
Me asomo a la terraza. Una mujer se arregla el pelo delante de un espejo en el edificio de enfrente de mi casa.
«Soy yo. Estaba por aquí abajo. Invítame a un café.» «Estoy un poco liado.» «Es igual. Tú sigues
pillada en un círculo de pesadilla y pescadilla que se masca la cola que no sabe ni cómo empezó los niños
Hojeando un libro de Rilke en edición bilingüe alemán/inglés que me he encontrado
El comienzo del verano y la noche yace como un cuerpo herido que la aurora no consigue desvelar… Recorro la ciudad taconeando
Me faltan algunos odios todavía. Estoy seguro de que existen. Céline El odio son las cosas que te gustaría hacer
Todo el día queriendo redactar este poema y ahora no recuerdo qué se supone que tenía que decir.
Lo llaman algunos. Otros dicen: «Hace falta valor, coraje, resistencia.» Y el caso es que nadie sabe nada.
«Esta luz, esta luz alicantina...», dije, llevándome a la boca el bote de cerveza. «Sí.» Era un 124 blanco, ¿no te a… La brisa
Ha puesto a Bach en el cassette. Me ha dicho que se iba a ver a unas amigas —un favor, me ha recordado, que le… a no sé quién–. Yo leo un libro,