Todo el día queriendo redactar este poema y ahora no recuerdo qué se supone que tenía que decir.
Otra maldita tarde de domingo, una de esas tardes que algún día escogeré para colgarme del último clavo ardiendo
Lo que sobrevive aún de la mañana… lentamente bajo una lluvia inesperada y fina,… sueños en los que no acabas de dor… En Canarias, según dicen, es ya l…
Hay personas que opinan que el poema se parece a un chiste. Otros, sin embargo, consideran
Lo llaman algunos. Otros dicen: «Hace falta valor, coraje, resistencia.» Y el caso es que nadie sabe nada.
Siéntate a la mesa. Bebe un vaso de agua. Saborea cada trago.
Me llama. Está borracho. Un poco borracho; la lengua le patina, y me imagino su babosa, su estúpida sonrisa.
El comienzo del verano y la noche yace como un cuerpo herido que la aurora no consigue desvelar… Recorro la ciudad taconeando
Una mujer que pasa en bicicleta a las dos de la mañana, hermosas piernas morenas bombeando los pedales
La cosa es muy sencilla, en realid… Coges y agarras una borrachera de dos días y al tercero resucitas de debajo de una pila
Tú sí tú no tú sí tú no tú sí
Ha puesto a Bach en el cassette. Me ha dicho que se iba a ver a unas amigas —un favor, me ha recordado, que le… a no sé quién–. Yo leo un libro,
Camino por el tejado del centro comercial. Lo tienen montado como un jardín. Plantas por aquí y por allá. Flores, enredaderas, incluso
Invertir cerca de un paquete de cigarrillos en la escritura de un poema de apenas ocho versos.
La vida es como despertarse a media noche aturdido y confuso, absolutamente