De «Leyes mudas de la mano alzada»
—¡Mira, una estrella fugaz! —¿Qué pasa con las estrellas fugac… —Que se debe pedir un deseo. —Ah… —¡Pídelo!
al innumerable grupo de enfermedad… hoy no felicitaremos porque no hab… ni tiempo suficiente si se le toma… por ejemplo, y perdonen lo aleator… podríamos felicitar al síndrome de…
En algún lugar sin nombre, sin mapa, estoy esperándome. El lugar es adentro de mí y cada vez se aleja más de donde e…
Para qué un poema extenso si la vida dura un verso.
Reverberación de las masas tras la… Organizaciones mundiales llegando… Laboratorios farmacéuticos frotand… Bolsas de valores botando la casa… Dípteros insignificantes sacudiend…
despierto de un sueño extraño dentro de mi otro yo sembré a otro yo
Desperté, pero el mundo sigue dorm…
No importa cuántas horas pasen entre poema y poema. La poesía no sabe leer el reloj.
La tarde cayó en mis ojos y se rompió en mil y un pedazos. Soy el trozo mil uno y los demás son incontables.
una bestia huye de mí y sobrevive yo huyo de otra bestia que sobrevivió
Escribo poesía a toda hora y mis manos ni lo saben.
Soy un animal defectuoso: escribo y leo, pienso y actúo. Pero tengo un problema mayor: el animal preferido de dios es el…
Resulto ser la bala. Irrumpo en la batalla, busco el corazón de la guerra. De camino, mato lo que soy, siembro nuevos miedos.
usted no necesita presentación aunque no le sobre, don nica y perdone que lo llame así pero es así como usted se llama como sea, y aunque fuera mejor que…
Desde que te conocí, poesía, me hice la misma pregunta. Desde que te conozco, me he hecho la misma pregunta. Y siempre estuviste,
