Cargando...

Lettre à lui

Todo lo que me queda es la espera, la espera se aglutina

Señor de las tinieblas lejanas, cada vez más cerca
Hoy, dejándome llevar por la belleza
he encontrado un poco en mí misma
en mi piel, en mis ojos, en mi boca
en el hombro descubierto, en mis edges, fronteras
y en ese género de música, suave como las nubes del oriente
a partir de mis pies, se ha fundido una sensación,
como la mantequilla en la tostada crujiente
me siento un poco más yo misma
hoy es una de esas noches, en que el cielo oscuro
eres tú
Habría de llamarte, e informarte... como antes
que el mundo no tiene dirección, pero
“No tengo por qué despertarte y molestar”
Mayakvoski entendió eso que tu no entenderás
ahora estoy, sujetando con correas de locura, mis locas ganas de llamar
Te he construido de nuevo, una y unas veces más
y no sé quién eres/fuiste tú
ahora que ya no lo sabré nunca más
subo el volumen a las músicas,
Bam Bam Ba...

Preferido o celebrado por...
Otras obras de Lillianne Rovier...



Top