En mármol frío reposan estos versos. Dejad que el viento me lo cuente al entrar por la ventana.

¿Qué es preferible? ¿Soñar despiertos o soñar dormidos… Los sueños, dormidos o despiertos, no son más que... ¡Un hilo vivo de agua, detrás de u…

Las cuatro décadas de tan hermosa niña, suman otoños.

En el silencio, mi oído siempre alerta, siente al fin... ¡paz!

El dolor es inevitable, pero, ¿y el sufrimiento? ¿Debemos aprender a convivir con él?

—Acércate hijo, ven, pon tu manito en mi vientre. Aquí, mira, aquí dentro está tu he… ¿Vamos a dibujarla tú y yo? le dije dándole un beso.

Saliendo el sol, corrí veloz al campo. ¡Volvió a llover!

Por densa selva, vuela sobre su sombra, un colibrí.

Vuela aquella golondrina por los c… esperaba ansioso sus plegarias. La golondrina sin rendirse, vuela… El canto poco a poco se fue convir… Y el río... el río ya no podía llo…

¡Oh! sol de vida, nutriendo las crisálidas, ¡Hay mariposas!

Tanta nostalgia anclada en el recuerdo. Vid goteando, y el río desbocado en su frío deshielo.

¡Cuanta hermosura! río, árbol, viento, flor. Lluvia de abril.

La decepción, tanto desengaño y desilusión. Es la gran frustración, el fiasco de la vida.

El rayo abruma y al cesar la tormenta, ¡lloran los sauces!

Es como lluvia que cayéndonos sobre la piel no moja. Es negra oscuridad rebozante de luz.