Me desbordo Soy una copa De vino rebalsada De vino rojo y espeso Me desbordo
Me pregunto Si en algún mundo alterno El espacio y el tiempo Fueron benignos Si sentí tus labios
El cielo, las estrellas Las cenizas que todo lo cubren Cubren la noche, El suelo, el mar, Cubren mi alma
los pendientes infinitos el anhelo incompleto suspendido en el aire y la punzada aguda de saber para siempre
Las puertas de mi bóveda ansiosas anhelan abrirse con el tacto helado de tu llave de plata
Duele tu ausencia, Mi soledad escondida En el deseo de tu piel Duele saberte lejos, Entre otros brazos,
Oscuridad Luces en una terraza Suspendida en el aire La brisa de un verano Moribundo
Es un suplicio como una sed inextinguible en el desierto árido y vasto sin tener al alcance el oasis de tus labios
Tengo puesto ese vestido El de esa noche Inefable de verano Tengo puesto ese vestido Te acordás
Me guardo La rabia contenida del deseo Un beso tuyo atragantado Los gemidos que no fueron nunca Me guardo
¿En qué me has convertido? Me has despojado violentamente de todo vestigio de razón ¿En qué me has convertido?
Ya no más Ya no juegan al fútbol los niños en la calle Curiales Las risas se ahogan en el vértice del tiempo
qué incómodo el sonido perpetuo de los grillos lamentándose en la noche eterna y calurosa de un diciembre cualquiera
tengo el corazón pesado de ausenci… de esos que se fueron de amores inconclusos de verdades veladas escondidas en la esquina remota
Es acaso posible Convivir con este impulso reprimid… Con estas ganas apagadas a la fuerza Se puede acaso dejar de desear