no es soledad no es tristeza ni amargura es el vacío de una ausencia
En este mundo inerte Gris y mundano El mero recuerdo de tu tacto Me envía una tierra de etérea dich… En este mundo injusto
Ya no más Ya no juegan al fútbol los niños en la calle Curiales Las risas se ahogan en el vértice del tiempo
Y yo aquí, así, un suspiro Un anhelo y la espera Y las ganas de que pienses En mí como yo en ti Y tú allá, así, quién
Pica, duele, arde Esta ansia inconclusa El párrafo sin punto final Que muere en mitad de la frase El cuento sin desenlace.
mi muso ignorante el numen profano de esta alma mendiga que implora sosiego a cambio de versos ignotos
Lo puedo tocar al cuerpo diáfano de las horas irrecuperables y de los momentos por siempre en el ayer encallados
Te veré partir Sin verte llegar Te veré partir Con el futuro sonriendo Y yo acá, quedándome
Llamame Ya no me importa ser esa ilusa que se sienta a esperarte
Escucho el río Ese río que parece mar El ruido de las olas Que llega desde el Sur Escucho los autos
Asfixio el grito contenido de mi alma Camuflo La desazón profunda de mis entraña… Soy un disfraz
Lluvia, autos, ruido Ómnibus que van y vienen Jueves en Montevideo Café, música, suspiros Las horas pasan
¿En qué me has convertido? Me has despojado violentamente de todo vestigio de razón ¿En qué me has convertido?
Noche de sábado Bullicios afuera Una música lejana que suena y suena y no para
Me desbordo Soy una copa De vino rebalsada De vino rojo y espeso Me desbordo