#Españoles (1985) Prosemas menos
Ayer fue miércoles toda la mañana. Por la tarde cambió: se puso casi lunes, la tristeza invadió los corazones y hubo un claro
Mi memoria conserva apenas solo el eco vacilante de su alta melodí… lamento de metal, rumor de alambre… voz de junco, también latido, vena.
Me falta una palabra, una palabra sólo. Un niño pide pan; yo pido menos. Una palabra dadme, una sencilla palabra que haga juego
A veces, las palabras se posan sob… mariposa sobre una flor, y las rec… Sin embargo, cuando pienso tu nomb… a la palabra color, aroma, vida. ¿Qué sería tu nombre sin ti?
Durante muchos siglos la costumbre fue ésta: aleccionar al hombre con historias a cargo de animales de voz docta, de solemne ademán o astutas tretas…
Aquello. No eso. Ni —mucho menos—esto. Aquello.
Una revolución. Luego una guerra. En aquellos dos años —que eran la quinta parte de toda mi vida—, ya había experimentado sensaciones…
Siempre alguna mujer me llevó de l… (para no hacer mención de otros ap… Anillado como un mono doméstico, salté de cama en cama.
Otro tiempo vendrá distinto a éste… Y alguien dirá: «Hablaste mal. Debiste haber cont… otras historias: violines estirándose indolentes
Mientras tú existas, mientras mi mirada te busque más allá de las colinas, mientras nada me llene el corazón,
Si tuviésemos la fuerza suficiente para apretar como es debido un tro… sólo nos quedaría entre las manos un poco de tierra. Y si tuviésemos más fuerza todavía
Le comenté: —Me entusiasman tus ojos. Y ella dijo: —¿Te gustan solos o con rimel? —Grandes,
Esperanza, araña negra del atardecer. Te paras no lejos de mi cuerpo abandonado, andas
Son las gaviotas, amor. Las lentas, altas gaviotas. Mar de invierno. El agua gris mancha de frío las rocas. Tus piernas, tus dulces piernas,
Entonces, en los atardeceres de verano, el viento traía desde el campo hasta mi call… un inestable olor a establo