Cargando...

Princesa

Princesa! En celar el destino de
la Hebe que despunta sobre esta
taza, con el beso de nuestros
labios, gasto mis fuegos, pero…
 
Para que el Amor con ala de
abanico me pinte en él, la
planta entre los dedos y adormeciendo, etc.
 
(Tumba) Para cumplir tan sólo,
un cándido acuerdo, sin beber
o contener su aliento él bebió allí,
 
un poco profundo arroyo calumniando: la muerte.
Otras obras de Carlos Mastronardi...



Top