Qué locura es la vida . Se nos va parte de ella tratando siempre de no perder, de no dejar todo aquello que queremos, de no perder lo que consideramos parte de nosotros, aunque en el fondo sintamos que lo que estamos realizando no nos está llevando a ningún lado. Al grado de preguntarnos en algunas ocasiones si estamos haciendo lo correcto o sólo estamos perdiendo el tiempo. Si merece la pena continuar o deberíamos abandonar.
Y justo ahí llegué hoy, a esa pregunta que me aprieta el corazón, que me duele hasta el alma: Mereces la pena o debo dejarte ir? Lo sé, la respuesta es muy clara, (debes ir tras tus sueños) pero por algún motivo que ni siquiera sé, me había empeñado en mantenerte junto a mi.
Es una relación difícil (en el buen sentido) que me ha venido causando mucho crecimiento y mucha alegría.
Pero muy dentro de mí, creo que sé lo que debo cambiar y lo que debo dejar ir, sin embargo, el sólo pensar en todos esos cambios me aterra; siento miedo y temor a imaginarme un futuro sin ti, pasando por alto el daño que te haría si continuas así (Sin ganas de seguir aquí), por otro lado ver que todos los sentimientos que invertí con la firme idea de haber tomado las decisiones correctas, terminarán en la basura, y peor aun, miedo a esa angustiante sensación de haber fracasado. Es por eso quiero convencerte de estar aqui, y seguir luchando por este amor una y otra vez como si se tratase de una actitud optimista, evadiendo todo tipo de señales de desinterés de tu parte. Me aferro a consejos y frases creyendo que todo puede funcionar, que un buen día los astros se van alinear y esa realidad que tanto deseo, se convierta en realidad. Pero sólo he conseguido que la realidad me golpee más duro cada vez, y lo último que quiero es convertirme un alguien que frene tu felicidad o no te deje luchar por tus sueños .Es cierto que no existen formulas, ni recetas mágicas que nos indiquen sin errores cuando debemos abandonar y cuando merece la pena seguir luchando por algo o por alguien.
Es por eso que hoy he decidido esclarecer mis límites mentales para tomar una decisión correcta, y darme cuenta que realmente no merece la pena que no estés donde no quieres estar, no merece la pena el sacrificio y las lágrimas, y definitivamente, llego el momento de que abandones esta lucha.
No es lo mismo tener una relación que funcione como equipo y estar en una relación con dificultades (problemas que surgen a partir de factores externos: dinero, enfermedad, etc.). Lo nuestro es luchar una y otra vez a la deriva, y eso sólo esta absorbiendo mi energía y aunque me duela decirlo, también afecta mi autoestima. Aquí lo más sano es tomar todo esto como una buena lección, no nada más para mejorar aquellos puntos débiles que nos afectaron, sino también para entender que son nuestras malas elecciones la causa principal del porqué muchas veces no nos va bien .Si lo analizas bien, no es muy difícil deducir por qué tipo de relación debes luchar hasta el final, verdad? Sin embargo muchos creen que en las complicadas es cuando más se debe persistir, pero cuando vienen las dificultades se rinden más fácilmente. El mundo está al revés. Déjame cambiar eso a partir de ahora y dejemos de luchar por causas perdidas, tienes que irte y déjarme sanar mi interior después de esto.
Y es que si no decido lo mejor para mí, quién lo hará?, Nadie! (aunque lo mejor para mi, pienso que eres tu) Pero  Nadie me puede indicar el momento exacto para abandonar o seguir adelante en una relación, (menos tu que solo estas pensando en ti) porque nadie me conoce mejor que yo misma. Haber invertido contigo tiempo, esfuerzo y sentimientos, no significa que merezca la pena seguir luchando por algo que no te está funcionando a ti, ni significa que seguir esperando resultados vaya a cambiar la situación; así como abandonar tampoco significa fracasar, por el contrario, porque muchas veces abandonar puede ser una manera infalible para no fracasar. Por último, sólo quiero decirte que luchare hasta el final, que doy lo mejor de mí y mi amor es verdadero.
Ahora mismo sé que es una de las decisiones más dolorosas que puedo tomar, pero espero algún día agradecer el haber dicho adiós a tiempo. (Cuando vea que lograste lo que querías) Porque sólo así podré conservar un buen recuerdo de esta relación. Todo queda en tus manos.. si quieres irte, azlo .. porque de mi parte no tengo fuerzas para retenerte y aunque las tuviera no lo haría. Debes hacer caso lo que dice tu corazón. Solo ahí tienes la respuesta.