Libro: Mi cama es una balsa a la deriva Autor: Juan Julio Alfaya Fernández Registrado en el Registro de la Propiedad Intelectual de la Xunta de Galicia.
¿Por qué puerta, oh lluvia, te me metes en el alma y me la vuelves paisaje de nostalg… Lluvia amada son tus finas gotas
Mi Biblia descansa callada en la… Nos miramos con respeto, apenas nos hablamos. Algunas de sus páginas me aterran, otras no las entiendo
Tenía el brazo izquierdo algo más… y los dedos del pie izquierdo pega… como pie de pato, pingüino o de ga… Pero su destino no era el de nadar… sino el de reducir a los humanos a…
El día se despide con su brisa más… ¿A quién le canta el ruiseñor que… posado sobre un cable telefónico ajeno a las palabras que circulan al azar entre sus ded…
Siéntate. Observa en silencio el mar en calma. Sus manos son las olas que acarician
¿Qué misteriosa ley me obliga a levantar el vuelo otra vez hacia el Sur, como hace años, y vagar entre la luz y el azahar
Lo que siento por ti ¿voy a encerrarlo yo en un nombre? ¿No será mejor dejarlo vivir, cuidarlo y acogerlo y alabar a Quien hace posible que…
Quedó vacío el banco sin nosotros, el banco silencioso que aún guarda el secreto de aquellos susurros
¿Quién retrasó nuestro encuentro? El miedo. ¿Quién te expulsó de mi cielo? El miedo. ¿Quién robó la paz que en mí pusis…
Mi segunda lengua la aprendí con plena libertad. Lengua entonces hermosa e inocente… es ahora una doncella violada a la que llaman “lengua propia”.
Te siento como el pulso en mí del Universo, como un latido de átomos y estrell… como una llamada ancestral a la Un… que me recorre de los pies a la ca…
El manso río que contemplaba arrobado cuando niño lo ocultan ahora grises edificios
Cómo nos cuesta amar y dejar libre no poseer ni con el pensamiento no convertir los sentimientos
En una esquina triste del salón va… me esperabas patético en el suelo. Más que un teléfono me pareciste un perro abandonado gimiendo por la vuelta de su dueño…
Cada vez que abro mi buzón el alma se me llena de vacío debido a la ausencia de esa carta que tú me prometiste y que presiento