La Esencia Femenina
La Esencia Femenina
De barro y luz me formó el cielo,
con risas de lluvia y piel de terciopelo.
Me dio cabellos que acarician el viento,
ojos que guardan secretos del tiempo.
Me vistió de montañas y de ríos,
curvas que dibujan caminos silenciosos.
En mis palmas sembró semillas de abrigo,
y en el pecho, un nido para el latido.
Me llenó de lunas y de savia creadora,
un vientre que enciende la chispa de aurora.
Con sus manos me tejió versos en la sangre,
para que el amor navegue sin naufragar.
Me dio voz de trueno y susurro de espuma,
fuerza de raíz y dulzura de pluma.
En mi alma bordó colores de resistencia,
y en los labios, canciones de paciencia.
Soy fragua que forja vida con el alma,
hogar que transforma el dolor en calma.
Paso a paso, cargo historias y destinos,
tejiendo esperanzas sobre el mismo lino.
A veces la lucha me quiebra las espaldas,
pero renazco en las grietas, hechizada.
Soy tempestad que arrulla en la tormenta,
y en mis cicatrices florece la siembra.
No soy solo cuerpo, soy memoria antigua,
la que hila caminos donde el alma se guía.
En mis huellas quedan versos por nacer,
y en mi sombra, el futuro ha de crecer.
Bendigo cada arruga, cada historia escrita,
la magia de ser tierra que alumbra vida.
Mujer: canto, lucha, ternura y razón...
¡Mi existir es un himno a la creación!
—Luis Barreda/LAB
