Loading...
a b c d e f g h i j k l m n o p q r s t u v w x y z All
Gustavo Adolfo Bécquer

Gustavo Adolfo Domínguez Bastida (Sevilla, 17 de febrero de 1836 – Madrid, 22 de diciembre de 1870), más conocido como Gustavo Adolfo Bécquer, fue un poeta y narrador español, perteneciente al movimiento del Romanticismo, aunque escribió en una etapa literaria perteneciente al Realismo. Por ser un romántico tardío, ha sido asociado igualmente con el movimiento posromántico. Aunque, mientras vivió, fue moderadamente conocido, sólo comenzó a ganar verdadero prestigio cuando, tras su muerte, fueron publicadas muchas de sus obras. Nació en Sevilla el 17 de febrero de 1836, hijo del pintor José Domínguez Insausti, que firmaba sus cuadros con el apellido de sus antepasados como José Domínguez Bécquer. Sus más conocidos trabajos son sus Rimas y Leyendas. Los poemas e historias incluidos en esta colección son esenciales para el estudio de la Literatura hispana, siendo ampliamente reconocidos por su influencia posterior. Gustavo Adolfo por Mercedes de Velilla En la margen del Betis murmurante, donde expira, entre flores, la onda inquieta, en monumento digno del poeta, su hermosa estatua se alzará triunfante. El sol le ofrecerá nimbo radiante; sus perfumes, la rosa y la violeta; la aurora, el beso de su luz discreta; el crepúsculo, brisa refrescante. Traerá la noche espíritus y hadas, visiones de Leyendas peregrinas que poblarán las verdes enramadas. La alondra y las obscuras golondrinas cantarán, al lucir las alboradas, las Rimas inmortales y divinas.

Juan de Arguijo

Juan de Arguijo (Sevilla, 1567 - ibíd. 1623), poeta y músico español perteneciente al Siglo de Oro en la corriente estética barroca. Hijo de familia acaudalada y caballero veinticuatro de su ciudad natal, fue nombrado procurador en las Cortes convocadas por Felipe III en 1598. Era además músico y diestro tañedor de vihuela, y se distinguió como mecenas de artistas y escritores. En su tertulia solía leer cuentos, que recogió el poeta sevillano Antonio Ortiz Melgarejo y editó Antonio Paz y Meliá en uno de los volúmenes de Sales españolas o agudezas del ingenio nacional (1902). En estas liberalidades y por su afición a la buena y disipada vida dilapidó bastante su patrimonio familiar y hubo de padecer bastantes estrecheces económicas en su vejez. En sus poemas suele aparecer bajo el sobrenombre poético de Arcicio. Reaccionó contra el culteranismo que sedujo a la mayoría de sus contemporáneos, pertenecientes también a la escuela sevillana, oponiendo a dicha estética el clasicismo y la erudición arqueológica, por lo que su poesía aparece a los criterios actuales demasiado culta y fría, si bien goza de una gran perfección formal y equlibrio, que lucen su virtud en sonetos perfectos como La constancia. En efecto, fue un gran sonetista, sobre todo sobre temas mitológicos, que eran los que prefería, aunque también compuso sonetos de tema moral como el anterior e históricos con el habitual desengaño y melancolía saturniana de los barrocos: A Baco, A Rómulo, A Troya, A Lucrecia, A Casandra, A Julio César, etc. Escribió cartas de gran valor literario y fue amigo y el mecenas sevillano de Lope de Vega, quien le dedicó sus Rimas y le imitó en algunos de los sonetos que contiene este libro de tema mitológico, histórico y grecolatino. De inspiración fundamentalmente clásica, académica y formal, seguidora del arte frente a la espontaneidad, pertenece a ese grupo de melancólicos poetas sevillanos que cantan a las ruinas, como Rodrigo Caro, que fue discípulo suyo. El equilibrio, la perfección formal, la temática clásica y la estética de Arguijo le constituyeron en el siglo XVIII como uno de los modelos de la literatura del Neoclasicismo junto a los escritores renacentistas del siglo XVI. Referencias Wikipedia - http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_de_Arguijo

Andrés Fernández de Andrada

Fue capitán del ejército español y estuvo en México, donde murió en la más absoluta pobreza, e ignorado de todos. Se le conoce fundamentalmente como autor de una obra que figura en todas las antologías de poesía clásica española por su perfección, la Epístola moral a Fabio, cumbre de la epístola horaciana en España. Sus fuentes literarias vienen del Antiguo Testamento, Séneca y Horacio y representa el espíritu de tradición senequista y de ascetismo cristiano en España, invitando a la resignación de una vida en "aurea mediocritas" o "dorada medianía" y reflexionando sobre la brevedad de la vida y la condición humana. La autoría del poema ha sido demostrada modernamente, por más que se atribuyera en principio a otros poetas de la época como Bartolomé Leonardo de Argensola o Francisco de Rioja. El primero en atinar con el verdadero escritor del poema fue Adolfo de Castro en un trabajo publicado en 1875, y Dámaso Alonso lo confirmó muchos años después con nuevos datos. El destinatario del poema en tercetos encadenados fue el corregidor de la ciudad de México Alonso Tello de Guzmán, deseoso de pretender cargos en la Corte, y le invita a la búsqueda de la virtud, la resignación y el "áureo equlilibrio", cantado ya por Horacio y Fray Luis de León en sus poesías. El poema se desarrolla con un visible ritmo bimembre, recurriendo al artificio del braquistiquio para destacar el significado de las palabras importantes. Referencias Wikipedia - http://es.wikipedia.org/wiki/Andrés_Fernández_de_Andrada




Top