Temo
Siempre se tienen historias de las palabras. Cada vez que descubrimos algo nuevo, la mente nos juega la mala pasada de recordar esa novedad como una verdad, lo irrefutable. Resulta, pas...
Despertarse en tu humo cenizo, oliendo tus entrañas en llamas. Que el mal llegará cada vez más... pero qué mal la verdad de mi ciuda… Bogotá: tus cerros nos han hecho d…
de la ironía soy arte mayor complejo sin razón desasosiego mi corazón.
El mundo de las palabras es de todos. La vida de las propias palabras son de uno. Son las palabras de mi ser mías y enigmas, porqué no sé cómo es que son más que ellas mismas. Es como s...
De la vida, todo. Un pozo en el que reposo el agua de mi gozo. Si se estanca, es la vida amarga.
De corazón, lo mejor deseo. Con la razón, en lo peor
De una brisa inconmensurable, como si soplaras los pétalos de una rosa, recuerdo tu voz armoniosa, la magnanimidad de tu Ser.
Yo pensaba y ello hacía. Ambos sentían pero el uno más tarde que el otro. Ello era el otro, yo era uno: así se entendían, adolecían su recíproca ironía. A veces, ello no hacía; yo divag...
Nunca, nadie, jamás, ha escrito lo que siempre, alguien, escribió. Vanidosa nada queriendo ser todo. Virtuosa nada que es estupefacta a…
Hay veces en las que pienso sobre la similitud entre el cielo y el mar, a luz de mis problemas osados de contingencia. Tendré, si al caso, muy pocos intentos para meditar sobre esto. ¿U...
Que no es amarga la dicha de la deriva, cuando y siempre se retorne de una mala ida. Aliada osadía de
Arde el sol al mar abierto. Abre el mar al sol ardiendo. Descubriendo, redescubriendo. Que el mar alcanzó a ser cielo, que el cielo le coloreó el espejo.
Del día inexorable alentaría el verso. La prosa lo llamaba en secreto procurando no ser
Rocío el vacío con el que vivo. Si todo tiene sentido, ¿lo vano es finito? Conceptos del artificio, orientando los significantes
Nadea la nada y el nadie es yo que nada soy yo que nadie se Ni a mi mismo