Las miradas también hablan y aprendiste a escuchar.
Levantarme, tocar tu puerta. Me invitas a seguir, entro. Bañas a Laura, visto a Laura, preparas desayuno mientras yo desenredo su pequeño cabello. Repasamos las tareas con ella. Salgo, ...
He de contemplar muchos ojos en el cuarto verde, pero ninguno detenerse a complacerse en mí. Los que más recuerdo son los de Leandro con sus pestañas largas y las puntas rojizas por el ...
Quiero sentirme mía, no tuya, redescubrirme toda, dejar el vacío y revolverlo, extenderlo,
(...) Te debo dar las gracias por la literatura que me ha secado lágrimas, pues contigo jamás la habría leído. Menos miradas por cada letra que no menciona tu nombre. Párrafos y párrafo...
Mágicamente niña, intocable, inocente al tacto, del amor ajena. Y dulcemente prohibida
El tiempo es la cosa más silenciosa que he vivido. Si te detienes a escuchar el campanario te puede dar la media noche sin sentir algún rumor; es que ni un latido puede darte, ni siquie...
De todo lo ocurrido siempre odié el recuerdo, los instantes, cúmulos intensos donde todo se vuelve concreto y se desvanecen como cenizas en el tiempo. Quédate un poco más. No deseo e...
Samael me contó una historia que al son de hoy no sé lo que es, pero me mostró con ella que el lugar de mayor riesgo para la vida de un niño empieza en el vientre de su madre solo por e...
Hoy lloré por la vida que se ahoga en mares de inconformismos. Lloré porque vi en la madrugada el silencio perturbador mientras cruzaba toda la 30 para ir hacia el frío de esa que no es...
Escribir con la fuerza en que la s…
Cuando el rostro desaparece y no hay en mí rastro de mujer ¿puedes tu noble hombre quitar el pegamento putrefacto que sostiene mi máscara?
Aquí estoy yo, con cuatro maletas y un montón de cajas, con las mentiras escondidas entre libros y los harapos que no se gastan por esa vieja maña de conservarlos como recuerdos vivos. ...
Tenía el miedo de que la vida me pasara, que no fuera yo quien con mis devenires brindara por ella. ¿Sabes? No ha pasado un solo segundo en que no sienta miedo, no te miento, tengo vei...
Al otro lado, un cuerpo cálido, un mar tejido en seda. la blanca textura mira, Se miran
Yo soy la que está en tu recamara, yo soy quien carga tu centro de mesa favorito y, a quien cualquiera con sus pies quisera acomodar, incluso, yo puedo jugar contigo a sostener un lápiz...