#Cubanos
Árbol, que de Fileno y su adorada velaste con tu sombra los amores, jamás del can ardiente los rigores dejen tu hermosa pompa marchitada. Al saludar tu copa embovedada,
Jamás puede un tirano La cadena cargar al pueblo fuerte Que enfurecido se alza, lidia, tri… O sufre noble muerte. ¡Pueblos famosos de la antigua Gr…
¡Escollo vencedor del tiempo cano, Isla en el mar oscuro del olvido, Misterio entre misterios distingui… De un inmenso arenal gran meridian… ¡Montaña artificial, resto tremend…
Hija de la beldad, ninfa divina, ¿Cuál es el alma helada Que al girar de tu planta delicada No se embriaga en placer? La orqu… Y al compás de sus ecos presurosos…
¡Cómo exalta y diviniza El rostro de la hermosura La expresión celeste y pura De la sensibilidad! ¡Cuán estático, mi amiga,
Cuando en la etérea cumbre De los eternos Andes se amontonan Mil pavorosas nubes, De hielo, fuego y destrucción preñ… Y con fúnebre cerco los coronan,
Cuando en el éter fúlgido y sereno Arden los astros por la noche umbr… El pecho de feliz melancolía Y confuso pavor siéntese lleno. ¡Ay! ¡así girarán cuando en el sen…
Cuando angustiado gimo En esta ausencia impía, Escucha, amada mía, La voz de mi dolor. Y cuando aquestos versos
Desde que te miré, joven hermoso, Sentado a par de la luciente hogue… Por mis venas corrió fuego dichoso… Que no puedo explicar. ¡Quién a t… Siempre vivir pudiera,
Dulce hermosura, de los cielos hij… don que los dioses a la tierra hic… oye benigna de mi tierno labio cántico puro. La grata risa de tu linda boca
¡Genio de Libertad, mi voz te imp… En todo clima tu fogoso aliento Esparció vida y luz, salud y glori… Por ti clamor inmenso de victoria Estremeció de Maratón los ecos,
Desde el suelo fatal de su destier… Tu triste amigo, Emilia deliciosa… Te dirige su voz; su voz que un dí… En los campos de Cuba floreciente… Virtud, amor y plácida esperanza
Si la pálida muerte se aplacara Con que yo mis riquezas le ofrecie… Si el oro y plata para sí quisiera… Y a mí la dulce vida me dejara; ¡Con cuánto ardor entonces me afan…
Si es dulce ver en el glorioso est… Ceñida el alba de purpúreas flores… Y entre blancas arenas y verdores Con manso curso deslizarse el río; Si es dulce al inocente pecho mío