Para empezar confieso que me importas
mas que el beso de amores fallecidos,
mas que todo lo que llevo por dentro
y en mis sentimientos mas dormidos.
Para empezar eres el eje de mi mundo,
la fuerza que impulsa mis sentidos,
sin ti no puedo flotar
y caigo en un abismo tan profundo.
Para empezar siembras agua en mis desiertos,
vuelves débil mi grandeza
y caigo en el vaivén incierto
de adorarte con delicadeza.
Para empezar si no estás ya no hay sentidos,
ni madrugadas, ni hadas en los cuentos,
sólo soledad y quebrantos florecidos
en el centro de todo lo que siento.