#EscritoresColombianos
Lázaro murió una vez, Pero nada se supo de su segunda mu… En la última de sus resurrecciones Es casi de rigor Que vuelva a aparecer ante los ojo…
Esta mano toma un fruto, La otra lo aleja. Una mano recibe al halcón, se quit… La otra lo ahuyenta, prende una an… Una mano escribe cartas de amor
Con árboles está levantada nuestra Casa. De casas está forjado todo El barrio. De barrios se configur… La ciudad. De ciudades ebrias se… Un país. De países así se constru…
Ha llegado, de nuevo, El poblador de las estaciones anfi… El caminante de una Babel de espe… Alguien lo ha visto Hablando con un ladrón de lejanías…
Una mecedora sola, agitada por el… Podría ser el habla oscura de la a… De la abuela que se niega a no reg… Un grito de halcón en la madrugada… De una noche más eterna.
Hago la lista negra de mis dudas e… sé si las cartas que no llegan son… (Al amanecer arrecia la lluvia y a… lejanos...) No sé, exactamente, si algún hombr…
Vendrá al atardecer, cuando el ruido callejero entre en las hendijas y busque mi corazón, que está en el patio. Girará la llave para entrar con sus gastados pasos. Reco– rrerá mis secr...
Se iba por un sueño. En silencio, descalzos pies, pasos de musgo, recorría parajes blancos cubiertos por el fino talco de los muertos. De regreso del sueño, qué premonitorio el nombre ...
¡Éstos son lugares! Teatros de ayer demolidos aun en sus telarañas, donde los cantantes muertos han perdido todo, hasta la piel, pero no la rosa en la solapa. Cabarets empolvados cuyos ...
Hay un pedazo de noche guardado en… Y un dibujo de Goya Que pone en la casa el claroscuro… Hay la pluma de un ángel Para escribir del vuelo.
Hombre o mujer, endriago o fantasm… Salga ya del cuadro y dese a camin… ¿No le aburre el mismo gesto crisp… Hombre o mujer, endriago o fantasm…
Dibujo, antes que nada, una puerta… Le trazo un cerrojo Con su forma de gota de agua Y diseño con el pincel la llave Que abre las dos hojas de madera,
Por los caminos ciegos, EL Trasterrado, el sin huellas. En las ciudades de cielos color de vino tinto, El Nocturno con un pájaro de sombra en los espejos. Así cantaba El Trasterrado: “...
Imagino una calle. A la realidad le resulta oscura y le agrega un farol. Basta que la realidad meta bazas en el asunto para que el farol reproduzca la sombra de una prostituta. Ya no si...
Voy por la calle con mi maletín de… Y mi billetera de becerro. Calzo zapatos de toro Y llevo un blusón rojo teñido en a… Toda mi ropa fue lavada por un sec…