Estoy quizá en un momento de inflexión,
es evidente que la vida no es un proceso lineal y siempre habrán obstáculos en el camino,
pero, lo que me diferencia a mí y al resto de personas exitosas, es qué, si nuestro árbol
se tuerce, sabremos con certeza que es para echar más raíces.

Y con ésta novena sinfonía termino una galería de poemas que me han llevado a la profunda introspección, poemas que me han dejado mella,
que me han hecho verter brebajes de conocimiento exclusivamente para mí,
íntimos momentos donde el mundo de las ideas se rinde ante mis pies
y me da un beso puro.

Esto de la poesía no es por mero gusto, es, curiosamente, un método vital
porque estoy lleno de vida, de naturaleza. Ahí en el cuaderno donde escribo
mis pensamientos, es interesante el hecho de pensar que propiedades de estas hojas están dentro de mí, y todo esto es una extensión de mi creación.

Escribo no para impresionar, sino
con el propio valor que nos caracteriza
a los poetas, de escribir lo que la gente no es capaz (porque no intenta)
pero que los hace sentir identificados.

Arte mediante bailes de fuego:
el ego voló lejos. Día antes del suceso
partí del sentimiento de reconocimiento ajeno,
en particularidades que encaminan a envenenamiento.

Miento y entro lento al tiempo
donde todo veloz se va,
al arte le puse velo
besa ahora mi razón.
Yo entre catacumbas
hurgando entre las tundras
de un helado corazón
descubrí la calidez
de la sencillez
y eso me dio valor.

Sumergido entre sutiles prosas las rosas florecen solas
y a solas me centro en el ser. ¿Pensar en lo qué ser?
A veces de pensarlo siento enloquecer.
¿Por qué ser?, al no ser, cercenas ilusiones,
códigos en tu alma destinada a pasajes
de paisajes hace rato esperándote.
Qué bonito sentirse querido, amado.
Qué interesante sentirse despreciado,
y lo que desencadena.

Si tuvieras el destino en la palma de la mano, ¿Podrías leerlo a la primera?
si no pudieras, ¿Encontrarías encarecidamente la solución?.
Si la respuesta es sí, bienaventurado, te encaminas a la cima,
y será bonito vernos allá, pero ¿Estás dispuesta/o a ser derrotado en muchas ocasiones, con finalidad de aprender y seguir adelante?.
Si tu respuesta es sí, felicidades, estás por encima de las personas que no lo intentan por miedo al fracaso, tu destino será el éxito.

Porque alguien una vez me dijo “no me gustan los problemas, me gustan las soluciones” y se me quedó grabado para siempre.
Y es que, la vida es maravillosa, mientras caminas conoces personas nuevas
que aunque quieras o no, te dejarán una enseñanza, a veces enseñanzas que duelen, que dejan incertidumbre; otras que alivian, hacen germinar nuevas flores dentro de ti.

Somos pedacitos de las personas que a lo largo de nuestras vidas nos marcan, para bien o para mal. Entonces, cuida con quién andas, a quién admiras. Observa sus tratos y sus caminos, aprende de lo que los ha llevado a crecer como personas, evita incorporarte sus malas mañas. Cuestiona todo lo que te dicen, pero, cuidado con esto.
Por supuesto, no es lo mismo enfrentarte a la persona y cuestionarle sus mensajes y quizá entrar en una agradable o incomoda conversación; a escuchar atentamente, observar y cuestionarte para ti si todo eso que ves, o que adquieres, te está llevando a donde quieres llegar y/o te está convirtiendo en la persona que sueñas.

No olvides que eres el propio universo observándose a sí mismo. Todo tu exterior es un reflejo del interior, todo lo que criticas en otras personas, lo tienes dentro tú. Todo lo que admiras de otra persona lo tienes dentro tú.
Tú eres el que crea la realidad, porque nadie puede percibir o sentir las cosas como las siente otra persona, podemos llegar a empatizar, pero, nunca sentir lo mismo.

Haz de cuenta que tu eres un cuerpo recostado en una tela fina, y al frente tuyo está otra tela fina que es todo aquello que sueñas, entre más lo pienses, más estudies, más enseñes, más vivas la vida según tu propósito, te volverás más pesado, más atrayente, estarás hundiéndote más y más en la tela del universo y porque serás más pesado, tendrás más fuerza de gravedad. Es decir, serás más atrayente para todo aquello que anhelas, te irás acercando mientras lo atraes, el éxito es completamente seguro si cuerpo y alma están al unísono de tus convicciones.

Y sentir, sentir la gratitud es la virtud más poderosa porque cambia las vidas, así como lo lees. La gratitud cambia vidas, porque aprendes a valorar lo sencillo, el mero hecho de respirar (lo estás haciendo inconscientemente en este momento), algo tan vital, tan necesario y hay personas que no les nace agradecerlo. ¡Es horroso! Te darás cuenta que entre más agradeces, más viene hacia ti, eres más propenso a lograr todo lo que te propongas.

Si escribo todo esto no es por soberbia o considerar que lo sé todo. Si escribo esto es porque todavía lo estoy aprendiendo y enseñar, me enseña.
Es mi propósito de vida, enseñar mediante arte.
Yo creo profundamente en ti y en que todo lo que te propongas lo puedes lograr, si estás dispuesto a afrontar el reto que conlleva.
Como diría un árabe: Maktub. Para entender completamente el significado de la palabra, tendrías que ser árabe, pero. Significa algo así como “Está escrito”.
Hazle caso al corazón, a tu intuición, no hay nada más puro y sincero que la intuición, ella va sin sesgos, ni mentiras, remordimiento o felicidad peligrosa.
Es tu propia alma comunicándose contigo, para prestar atención en algo.

Hazle caso al corazón, porque este hace parte del alma del mundo, y siempre te guiará para cumplir tu leyenda personal, te mostrará señales en el camino, tú eres quién debe saber leerlas e interpretarlas, y todo esto sólo lo podrás saber y entender cuando decidas comenzar tu leyenda personal, porque la intuición te dará la razón.

La leyenda personal es una búsqueda, no estoy diciendo que sea algo fácil de hacer, por eso hay tantas personas que no cumplen sus sueños y tan pocas que sí. Los que cumplen sus sueños es porque estuvieron dispuestos a arriesgar todo desde el día uno, o porque su intuición los llevó a superar obstáculos necesarios.

Así qué, finalizo con esta frase hermosa del libro que me estoy leyendo “El Alquimista” de Paulo Coelho. “Una búsqueda empieza siempre con la suerte del principiante. Y termina con la prueba del conquistador”. Si deseas encontrar tu leyenda personal y encaminarte a la cima, te recomiendo este hermoso libro.

Aquí finaliza mi novena sinfonía, dando por completada mi colección de poemas, mis sentires, pensamientos y caos expuestos para su propia crítica.
Sólo deseo que creen diálogos internos con algún mensaje o poema de mi autoría, que
piensen y reflexionen de sus propias vidas.