Es un suplicio como una sed inextinguible en el desierto árido y vasto sin tener al alcance el oasis de tus labios
El cielo, las estrellas Las cenizas que todo lo cubren Cubren la noche, El suelo, el mar, Cubren mi alma
Escucho el río Ese río que parece mar El ruido de las olas Que llega desde el Sur Escucho los autos
los pendientes infinitos el anhelo incompleto suspendido en el aire y la punzada aguda de saber para siempre
Me desbordo Soy una copa De vino rebalsada De vino rojo y espeso Me desbordo
Es acaso posible Convivir con este impulso reprimid… Con estas ganas apagadas a la fuerza Se puede acaso dejar de desear
En la tenue oscuridad hay tres sofás y desconocidos sin rostro que salen y entran Las manecillas
Y yo aquí, así, un suspiro Un anhelo y la espera Y las ganas de que pienses En mí como yo en ti Y tú allá, así, quién
Pica, duele, arde Esta ansia inconclusa El párrafo sin punto final Que muere en mitad de la frase El cuento sin desenlace.
¿En qué me has convertido? Me has despojado violentamente de todo vestigio de razón ¿En qué me has convertido?
poemas muertos palabras perdidas en mis noches en vela versos que pasean en la calesita eterna
Otra despedida Esta, un poco más tierna Aunque no recuerdo tanto la anteri… Otra partida tuya Esperada e inevitable
no es soledad no es tristeza ni amargura es el vacío de una ausencia
Ya no soy Estoy despojada Como los árboles De sus ramas Después del vendaval
Esta ausencia palpable, notoria Emocional y física Tal vez más física, porque estás l… Muy lejos Estás tan lejos que vivimos