Lo Inefable
Un poema cuento de terror
La puta (el diablo, el mal, la muerte, lo indigno, la aberración...) y un torturado.
1
El poeta que creando, un inefable
se asemeja a una puta que escupe dignidad lanzando discursos desde la muerte.
Y antes déjenme explicar a que poeta
y a que puta me refiero.
Tú y yo hemos estado unidos
desde El principio de todo, y todo ese rollo
que las putas se ríen con la boca
repleta de penes sucios.
Que propagan enfermedad y muerte
y hambre y guerra.
2
Apareciste Puta.
Con planes y proyectos, con los zapatos viejos que te pones para pisar al hombre, con las gafas de las misiones especiales.
Y viéndote Poeta te encaré desnudo
y te ofrecí sin condiciones,
el pecho y el contrato de mi pecho
y todo yo que era uno y solo
y luego tú que eras miles, y los rencores
y las mentiras y el daño de esos miles
y el precipicio donde se suicidan los poetas.
Pero solo los que no admiten lo inefable.
Y yo que venía del daño del infierno mismo
y tú que en el infierno tenías nómina.
Ahora tras humillarme y torturarme
por esa costumbre de afear,
de buscar en lugares equivocados.
En esa elección innoble que os amolda y disparata. En esa lucha en la que se mueren la vida y el amor y las ideas y los sueños.
Luego las putas viviréis en un inefable.
Luego de haber vencido cuando ya no quede nadie.
Y si acaso.
Que si me dices del daño, por engañar y seguir torturando, para retorcer más la humillación, o porque aún podríamos, aún, igual.
Entonces quémate.
Pero después no hay cristales ni luces nuevas,
no hay un algo desde siempre,
no hay montañas ni descubrimientos.
Si lo que queda es mejor no lo sé
pero estará limpio.
3
Tu suavidad alimenta en los panales
porque tiene buena letra
suena bien al oído y los domingos te la puedes colgar en la misa.
Tú eres dulce y contenida,
y un regalo
allí donde predicas.
Lo que falla y que yo te veo,
yo brusco tirano, insensato, retrógrado, asocial y también ese adjetivo que una noche entre lágrimas de música me inventaste.
Lo que falla es que se aplauden las mentiras, la especie está enferma y se ríen.
Y aunque te guarde odio y aunque te guarde rencor, y aunque me parezca ahora la vida un muro.
Te guardo en esta arquitectura mía de demonio besos y caricias y un mapa de un camino.
4
Tal vez con media hora bastase
para ver al completo la película de la felicidad.
Tal vez con media hora en ruinas
se destruyan los universos.
De mi parte, de mi muy pequeña parte
si me lo pides y si me dejas llorarte
si me ayudas a entenderte
si me ayudas a encontrarme
y si me lo pides claro,
si me lo pides.
Me voy contigo a lo inefable.
5
Tiene lo inefable mil demonios
que vigilan con ojos de lagarto
y te regalan peines de plástico
mientras te sonríen el odio.
Se parece más al infierno
donde dicen que los lagartos
hacen publicidad de condones para el pelo.
En lo inefable las cucarachas hacen carreras y se retuercen y vomitan.
Y se envían fotos mientras mastican heces
y se ríen, se ríen todo el tiempo.
Como anormales dementes
y reparten propaganda en bicicleta
y contaminan el mundo de los hombres.
