Lo confieso, no sé por qué me da tanta vergüenza desnudarme el corazón y no la carne. Aún tengo secuelas de cuando me lancé sin alas al vacío, de cuando me clavaron un te quiero de mentira y el un puñal que vino después.

Supongo que esas cosas son las que hoy me impiden besarte y romper cadenas, mirarte con la verdad en las pupilas, quererte... enamorarme de ti.

Tengo miedo a que me rompas en tantos trozos que ni los años puedan reconstruirme, pánico a que encuentres hogar en otros labios, se me hace un nudo en la garganta si pienso que te vas con mi llanto en la espalda....que te marchas justo cuando mi pecho se ha quitado la coraza.

Llevo el pasado a cuestas, yo en su día directa a urgencias y una operación a corazón abierto  sin vuelta atrás. Luego está mi otro yo que se vuelve heroína y tiene a cada rato la necesidad inexplicable de un beso rápido y sucio, de un azote mal dado y una vida de amor sincero.

He aprendido a querer de muchas maneras distintas y al final el golpe era siempre lo  mismo, tramposos de tablero y adiós a las reglas, así que explícame por qué debería dejar que te volvieras parte de mi vida si no sé ni cómo dejar que te enamores de mí. No sé por qué me da tanta vergüenza escupir ‘te amo’ por la boca, supongo que será porque en su día fueron burla, les hicieron bullying las mentiras y hoy no se atreven a salir sin hechos que marquen.

Tengo miedo a enamorarme de ti, pero luego me coses las entrañas con cada beso, te vuelves casa todo vale aunque nada esté escrito... soy la primera persona que siempre dice eso de tirarse sin paracaídas cuando se trata de amor, eso de no esperar y aventurarse, de no dejar escapar....pero confieso que cuando lo tienes cerca el estómago se te cierra de golpe y el corazón no sabe qué hacer... así que dime por qué debería dejar que habitaras en mi cabeza por más de una noche y un día.

¿Seguro que quieres es que apueste por nosotros? No te equivoques, recuerda que tengo miedo a enamorarme y que al lado de los sueños todo el mundo se siente pequeño.

Sí, amar es de valientes.