Bala
Parte de la obra "MAOA-L, Poesía de los desafines de un corazón criminal"
Castaño, cobrizo, inmutado y recién explosión,
el olor del plomo se diluye en MI cuerpo,
se enfrena como un pájaro,
se seca como un arroyuelo.
Me desanima, me apasiona,
me calma y me arrulla,
me desenfrena el delirio altruista,
me asigna responsabilidades maravillosas.
Toca, dulce tono plateado, y refleja mi piel,
mis sentimientos, mi ideal y confusión.
Ve y siento. Habla y entiendo.
Toco y me hiere. Atraviesa y mata.
Ama, en cambio. Respeta.
Su forma redonda hace un contorno,
realza la importancia del ser,
y toca el alma sin preguntar.
Calla los gestos. Ahoga los deseos.
Saborea, se burla, y con pasión
desgargante, se mofa del día,
de la habilidad insensata de negociar.
Incluye un grito. Incluye, de vez en vez,
una reflexión de arrepentimiento.
Genera en unísono una canción,
atrapa sin cuidado una vida, una eterna sencilla.
Ciega. Ensordece. Enmudece. Todo para siempre.
Piaciuto o affrontato da...
