#Españoles
Esta noche, por lo que a mí respecta bien podría saltar el mundo en mil pedazos. Por qué no. Y nosotros con él. Acabar. Echarle de una vez
No es que moleste en sí, pero cuesta acostumbrarse. Eso de que vayas por ahí
Mujeres como tú son las que consiguen que se declaren las guerras y que algún general
Ya poseemos casi todo lo que nos iba a hacer felices. Puede decirse
Gente exhausta, con la vista clavada en el suelo,
Como el viento que encuentra una rendija y se cuela en la habitación y lo desordena todo libros
Enamorarse es fácil. Uno puede enamorarse —sin demasiado esfuerzo— varias veces al día, a nada
Uno siempre espera que suceda algo, que algo bueno suceda, algo que le dé un giro brusco, un empujón, un bandazo
Como a veces nos viene a la memoria algo sin importancia que dejamos para el día siguiente
Con los días contados, chaval, así vivimos todos. Esperando a que nos tachen de la lista. Distrayendo
Las primeras tienen su cosa, es cierto. Otra vez con el trago en la mano, uno se siente a gusto de sentirse tan mal, de tener ese cuerpo,
De aquí a un tiempo, puede que llegue a ser como vivir
Es inútil buscarlo. Cuando menos lo esperas, aparece en un bar. Y ya nada es igual en adelante. Un día tocas los dientes de la gloria,
Sale de la marquesina y mira hacia la izquierda; vuelve y reinicia su pequeño “claqueteo” nervioso. No aguanta más, se muere, necesita
El último salvavidas al que suelo agarrarme en estos casos, el teléfono, hoy tampoco me sirve.