#Españoles
Llegan y se van sin hacer ruido —como buenos clientes—, luego el tiempo los confunde
Tienes veinte años, tienes a la vida por el cuello a tu merced; pero no es suficiente,
Cuídate mucho de los que sólo miran, de los que siempre están detrás, de esos a los que nunca
No es que moleste en sí, pero cuesta acostumbrarse. Eso de que vayas por ahí
No solo eres guapo, fuerte y listo, sino que además de conciencia ni una pizca
Llora cuanto quieras sobre mi hombro, desahógate, cuenta conmigo para lo que haga falta.
Después de haber visto el mundo, a través de una botella, durante más de quince años, ahora –pasada ya la cumbre de la r…
Nunca lo he visto antes, pero conozco a ese hombre. (Si me acercase, distinguiría en sus ojos
Esta noche, por lo que a mí respecta bien podría saltar el mundo en mil pedazos. Por qué no. Y nosotros con él. Acabar. Echarle de una vez
El último salvavidas al que suelo agarrarme en estos casos, el teléfono, hoy tampoco me sirve.
En todas las ciudades que he pisado me ha parecido verte: un autobús que arranca y que no cojo,
De aquí a un tiempo, puede que llegue a ser como vivir
Dejo el periódico sobre la barra. Enciendo un cigarrillo. Tomo
Gente exhausta, con la vista clavada en el suelo,
Como el viento que encuentra una rendija y se cuela en la habitación y lo desordena todo libros