#EscritoresEspañoles
Ándate con cuidado, que no se entere nadie de que lo pasas bien, que tu vida funciona, y eres feliz a ratos.
Como el viento que encuentra una rendija y se cuela en la habitación y lo desordena todo libros
Un paquete de tabaco, un libro de poemas, cuarenta duros para tomar unas cervezas... Poca cosa, es verdad:
Tienes veinte años, tienes a la vida por el cuello a tu merced; pero no es suficiente,
Mi mujer y mi hija, estas paredes y estos libros, un puñado de amigos que me quieren —y a los que quiero de verdad—,
Ya poseemos casi todo lo que nos iba a hacer felices. Puede decirse
El último salvavidas al que suelo agarrarme en estos casos, el teléfono, hoy tampoco me sirve.
Tendría alrededor de ochenta años, estaba atascada en un semáforo, como un barquito de vela bajo la tormenta,
No solo eres guapo, fuerte y listo, sino que además de conciencia ni una pizca
Alegra esa cara, hombre —dicen, dándote una palmadita en la espalda–, hay que ser más
Esta noche, por lo que a mí respecta bien podría saltar el mundo en mil pedazos. Por qué no. Y nosotros con él. Acabar. Echarle de una vez
Acaba de cruzar frente a mi parabrisas. Es ella. La recuerdo
Llora cuanto quieras sobre mi hombro, desahógate, cuenta conmigo para lo que haga falta.
Hace unos minutos que ha recibido la llamada, y desde entonces no ha soltado el… Qué tristes son las lágrimas de un viejo,
Es lo que tiene, el amor: empiezas siendo el galán protagonista