#Españoles
El futuro es vuestro, chavales, decían, como quien te dice que te ha tocado algo,
Mi mujer y mi hija, estas paredes y estos libros, un puñado de amigos que me quieren —y a los que quiero de verdad—,
Ya poseemos casi todo lo que nos iba a hacer felices. Puede decirse
Con los días contados, chaval, así vivimos todos. Esperando a que nos tachen de la lista. Distrayendo
Llegan y se van sin hacer ruido —como buenos clientes—, luego el tiempo los confunde
Están cogidos de la mano en silencio, bajo los soportales. El niño mira su columpio, muy triste,
En todas las ciudades que he pisado me ha parecido verte: un autobús que arranca y que no cojo,
De aquí a un tiempo, puede que llegue a ser como vivir
El último salvavidas al que suelo agarrarme en estos casos, el teléfono, hoy tampoco me sirve.
No solo eres guapo, fuerte y listo, sino que además de conciencia ni una pizca
Lentos por las aceras, inmóviles en las repisas, aovillados
La radio está encendida. Suena la pedorreta de una moto
Alegra esa cara, hombre —dicen, dándote una palmadita en la espalda–, hay que ser más
Nunca lo he visto antes, pero conozco a ese hombre. (Si me acercase, distinguiría en sus ojos
Gente exhausta, con la vista clavada en el suelo,