RETABLO DE UN BRUSCO DESPERTAR
Jardines
y jardincillos...
Un astro
rojiamarillo
salta la verja
de mi balcón
y sigiloso
por la ventana
mientras yo duermo
entra y me llama,
dice: «¡Madrugue,
madrugador!»
¡Escenas
que se borraron!
¡Oh, duendes
descabezados!,
¿quién me deslumbra
con su esplendor?
¿quién quita al sueño
sus formas vagas
y desdibuja
las pinceladas...?
—¡Alza tus rayos
y vete, Sol!