No hay otra luz
por Manuel Ángel Vázquez Medel
“Lume non è, se non vien dal sereno/ che non si turba mai”.
Dante, Paraíso, XIX, 64-65
La verdadera luz viene de arriba
como lluvia fecunda que renueva
el corazón. Por dentro nos enciende:
somos antorchas vivas, luz del cielo,
fuego que irradian nuestras manos
cuando acarician, cuando entregan
la vibración cordial en el abrazo,
cuando se elevan: vuelos misteriosos
para acoger la gracia que nos llega.
No hay otra luz:
lo demás, fuegos fatuos que al abismo conducen.
No hay otra luz:
la que viene del cielo sereno, imperturbable.
Acógela en tus manos como flor invisible
que con amor regalas.
Manuel Ángel Vázquez Medel
