Mareas
Sabré olvidar
Porque el silencio no da opción cuando uno canta
Y este dolor se ha de esfumar en mi garganta
Sabré olvidar
Sabré olvidar
Aunque ahora cargo la desgracia entre mis dientes
Pues sonreir es un remedio de valientes
Sabré olvidar- Silvana Estrada
Cambiaste mareas y corrientes... canta Silvana Estrada (de mis cantautoras favoritas).
Es que el cambio de perspectiva duele, se va marcando un nuevo nacimiento, no se sabe. Puedo ser un nuevo yo u otro que no dejaba salir de mi corazón.
No se hace fácil mirar-se, y descubrirse herido, abandonado, casi un espejismo de lo que solía ser. Un ser-sentir que ya no hay nadie ni fenómeno que lo apure a guardarse el sentimiento porque cada poro es una nueva forma manifiesta que llega a decirte: “tengo para ti un nuevo sentimiento que mostrar”.
Me preguntaron una vez, que si mi proceso de psico-terapia era hermoso y sí, lo es. Pero esa hermosura no ha salido de un proceso romántico, se ha trabajado desde un lugar doloroso, que sangra cada vez que lo dejo ser y sentir, que cada que lo pongo a prueba me sorprendo más de cómo las mareas solo me llevan a descubrir nuevos puertos en este océano de sensaciones.
¡Hay un niño ahí dentro! que ahora parece tener a su adulto que siempre soñó con que lo sostuviera.
Pero ese adulto sigue aprendiendo, le siguen ardiendo sus pies porque le pasa tanta sangre por sus venas que las siente, correr, traspasar, limpiar, moldear como la corriente del río en el que un día soñé dejar de respirar.
Escuchando a mi cantautora favorita Silvana Estrada y su disco "Marchita".
