Quiebracanta
Sobre los matorrales dormidos
ha florecido la quiebracanta
que en su corola blanda
guarda el rocío de la mañana
Porqué siendo tan bella
nace entre escobilla y cizaña;
entre dientes de león, pápalo y verdolaga
¡Oh Quiebracanta!
Quiebra que cantas
campana abierta del alba
que a cualquier mirada encantas:
Azul místico que callas.
Las flores de los pobres
con manos honestas son cortadas
y entre todas las que crecen en el monte
eres la más agraciada
Le pido a Dios que cuando me llame a cuentas
sea en octubre cuando tus botones estallan;
que en vez de carolinas y trinitarias
sean tus campanas que cubran mi lustrosa caja.