De «Un (casi) poema (malo) al día»
Desperté dentro de un gato en su ú…
Mañana será otro día, le dije a la poesía mientras se en… al riguroso placer de volver a cas… Mañana será el mismo día, dije cuando ya no me escuchaba.
Más que temerle a qué dirán le temo al qué diré.
Soy poeta y no tengo remedio. Ni quiero tenerlo. Soy poeta, y es irremediable:
lamento destruir sus castillos en… pero yo soy el hombre más rápido d… me lo imaginé ya a usted apuntándo… cuando todavía usted ni el disparo… y lamento destruir mis castillos e…
disculpe la pregunta, bailarín pero quisiera saber qué se siente que los extraterrestres no lo teng… pero que parezca
Discípula inequívoca matando a una… Hija perfecta salvando a hijos imp… Hermana pública multiplicando por… Contravención de estatutos natural… Lógica de las hormonas futuristas…
C: \Users \Sergio_Marentes \Documents \Borrar
La poesía es como los relojes: funcionan todos igual, pero diferente. Como el pan antes de serlo,
—Nos vemos allá, si te parece. —Sí, seguro, pero, ¿cómo te recono… —Soy el que va disfrazado de perso…
Sé que no existe quién me ampare. Me atañe más quién me extrañe. No importa si ella, de la mano, me… por una noche larga, sin fin, sin… etérea, como mi amor por la vida,
No importa el lado de la puerta que nos vea. El afuera siempre está adentro.
No importa quiénes sean los comensales al otro lado del libro. La poesía no sabe dar de comer.
Nadie sabe para quién trabaja si su trabajo es escribir.
Desperté con la mitad de los ojos.…